jueves, marzo 01, 2007

He visto un pobre

De camino a mi trabajo (desde la estación de metro hasta la puerta, que habrá como unos 7 minutos o así), me encuentro siempre a un tipo que pide para tomarse un café en el Jamaica que hay al lado. Este señor tiene bastante arte con este tema, no creáis, porque pide a grito pelado y como cantando: "Unaaaaaaa moneeeedaaaaaaaaa... para tomar caféééééééé conlecheyunbollooooooooooooo... en el Jamaicaaaaaaa". Y así en un bucle continuo. Mientras pide, merodea alrededor del Jamaica dando pasitos muy pequeños.

Por regla general, y a diferencia de mucha gente, a mí los mendigos ni me dan pena, ni me compadezco de ellos ni me repugnan. Me provocan angustia, aunque suene raro decirlo. Evidentemente, a veces ves cosas que te dejan el estómago volcado, que no es que yo sea un insensible... Lo que pasa es que desde muy pequeño me acostumbré a pensar que muchos de los que están en la calle, lo están porque las cosas les han ido mal, y que en realidad, eso le puede pasar a cualquiera. Vamos, que lo que siempre he pensado es que cualquier día yo puedo acabar igual, así que mi ego crece y me angustio al verme en la calle cualquier día; en lugar de empatizar con la persona que tiene el problema. Yo es que tengo mucho arte para estas cosas. Que conste, eso sí, que yo empatizo siempre con todo el mundo, porque lloro hasta con los anuncios de detergente que son tristes.

A lo que íbamos: que desde el lunes, este señor que pedía en la puerta del Jamaica había desaparecido. Ayer ya me empecé a preocupar un poco, e imaginaba que le habría pasado algo. Sin embargo, esta mañana, justo al salir de la estación, he oído su característica cantinela.

No le conozco de nada, y la verdad es que -conscientemente- nunca me había preocupado por él... pero la verdad es que me he alegrado muchísimo al ver que está bien. Como mi economía no anda muy boyante, nunca le daba nada (además, nunca suelo dar dinero a nadie) pero hoy le he soltado una moneda de dos euros, para que se pueda tomar su cafecito y su bollo en el Jamaica.
[Mood: Hoy tengo que pagar el alquiler y me estoy poniendo enfermo.]
[My iPod says: Patrick Wolf - Accident & Emergency]

9 comentarios:

Tony Tornado dijo...

¡pero qué bueniño eres!

Corredero dijo...

No te has aprendido bien la canción. la cosa es: "Una monedaaaaaaaaa...para tomar caféeeeeeeee... en el Jamaicaaaaaaaaaaaaaaaa........con un bollooooooooo".
Que yo siempre pienso que tiene una amiga bollera escondida por ahí para acompañarle a desayunar esto que anuncia.
Y no te preocupes por sus desapariciones, son frecuentes. Pero siempre vuelve.
Jaté que me acabo de dar cuenta que trabajamos cerca...

Myrme dijo...

Por aquí vienen unos pedigüeños muy descarados, que se reparten por la calle y van llamando unos a unas puertas y otros a otras.

Uno de ellos es un gitano jovencito guapérrimo al que algún día que me diga "dame argo" le voy a decir "¿te valgo yo?"

Ya he actualizado :P

Enebro dijo...

Que cosas, cuando he leido el título de tu post he soltado la carcajada porque pensé que ibas a escribir algo frívolo del estilo "¡he visto un pobre, osea y te lo juro!" pero luego he visto que la historia iba en serio y me has conmovido. Sniff.

Raquel Ritz dijo...

Vaya, pensaba que era la única "mala persona" que se sentía así al ver un pobre.
A mí me pasa lo mismo con unos que viven en Coruña, es una pareja que se ha juntado, supongo, por esto de estar en la calle. Él parece que la va a palmar desde hace más de 10 años y ella es rolliza y sonriente. Nunca les dí nada, hasta que un día, cuando conseguí mi primer trabajo en lo que me gustaba, pasé de largo al lado de ella y al momento me sentí fatal. Volví para darle 10€ y siguió tan pancha. Claro, ella no sabía que era la primera vez en mi vida que soltaba pasta tan alegremente y sin motivo.
Si por algo no le doy dinero a la gente que vive en la calle es porque hay mucho cara (¿alguien se acuerda de los reportajes de periodistas haciéndose pasar por pobre en Madrid?, recibían más sueldo en una mañana que cualquiera de nosotros en toda una semana), que se aprovecha de la bondad de los demás. Anda que no he conocido gente que lo deja todo para ser un trotamunos porque sí. Entonces me planteo el debate: ¿es lícito que te miren mal por no darles? Así que solo les doy a los que conozco de vista. Eso sí, luego lloro al ver un perrito abandonado o una paloma cojeando.

dwalks dijo...

mis pobres favoritos de madrid eran una pareja que estaba hace tiempo que Quevedo, que se había montado un loft chulísimo con pladures y cartones. tenían perros y una mesita a la puerta para cuando invitaban gente (esto es cierto, yo una vez les vi con unos amigos tomando algo en esa mesa...). ya no están, pero salieron en telemadrid y todo.

luego en mi barrio, teníamos un pobre oficial en la puerta del supermercado, estaba siempre ahí. un día desapareció y a los quince días o así volvió sin la nariz (o sea, dode antes estaba la nariz, llevaba una tirita, superfuerte). hace años que ya no está, pero esto fue supercomentado en mi barrio, todo un jit.

Unknown dijo...

Una vez lei la historia d euna mendiga de Madrid que murió y al reconstruir su vida la policia descubrió que era una noble que por diversos motivos acabó de homeless. Nunca se sabe.

Creo que si has escrito este post es porque relamente te preocupa, aunque intestes hacernso creer lo contrario.

Anónimo dijo...

¡¡Dos euros!! Eso es mucha tela.
Yo nunca doy nada, tampoco me dan pena, y si, comparto esa angustia. Me angustia que me pidan y sobre todo que me atosiguen con que les dé algo.
Hale, ¡a cuidarse!

bernardopajares dijo...

Que majo eres oye, ahí se te ha visto el corazoncito. Has soltado ya la talegada para el alquiler? Yo el lunes, ay...